El deterioro de la libertad de prensa y el derecho a la información

El II Simposio sobre libertad de prensa celebrado en Lleida los días 3 y 4 de mayo de 2016, organizado por el Col·legi de Periodistes de Catalunya-sección Lleida y la Universitat de Lleida (UdL), se centró en el estado de la libertad de prensa en los medios públicos, aunque también se abordaron otras dimensiones de la libertad de prensa, con cuestiones y preocupaciones que son compartidas entre medios públicos y privados.

Este dossier para el Portal de la Comunicación (InCom-UAB), elaborado por el Comité organizador del simposio, aporta los principales contenidos presentados en las comunicaciones y ponencias, y debate posterior, que pusieron sobre la mesa algunas de las principales amenazas a la libertad de prensa en nuestro país, así como determinadas propuestas o conclusiones para avanzar en la implementación de mecanismos y consensos que mejoren la calidad de nuestro sistema de medios y, con esto, del derecho a la información de la ciudadanía.[1]

La conferencia inaugural de Milagros Pérez Oliva empezó con el reconocimiento de la existencia de libertad de prensa en nuestro país, para analizar después como los medios y los periodistas ejercen esta libertad con un tipo de periodismo que a menudo menoscaba el derecho de la información de la ciudadanía. Y esto precisamente en un momento en el que la complejidad del entorno requiere de un periodismo de calidad que ayude a la población a entender los cambios y retos que nos afectan. La periodista catalana remarcó la importancia de los medios de comunicación en la creación de marcos conceptuales que delimitan el debate político posible, a través de los mecanismos de control de la visibilidad de los diferentes actores y problemas sociales. Así, destacó cómo el sistema político en gran medida está induciendo la agenda y los enfoques mediáticos, ya sea por la “partidización” de los medios públicos, como a través de la acción de los gabinetes de prensa institucionales y de partido, de la proliferación de medios de comunicación que están financiados y responden a los intereses de los partidos políticos vinculados a la propiedad, o a través del reparto de ayudas públicas y la publicidad institucional.

Milagros Pérez Oliva apuntó a una crisis de mediación que afecta tanto a los partidos políticos como a las empresas periodísticas, y que explico cómo una crisis del valor de la verdad —y por tanto, de la confianza. Las presiones contra la independencia periodística y la inflación de los medios que, especialmente en la esfera digital, alimenta un periodismo de versiones interesadas, que buscan la repetición en múltiples altavoces, llevaría a un falso periodismo y una falsa neutralidad que pone al mismo nivel la verdad y la mentira. Por este motivo, la periodista reclamó una buena praxis periodística, que reconozca el valor de la verdad en la información y que recupere la autonomía profesional en la elaboración de un discurso periodístico que no se limite a reproducir los argumentarios y temas que marcan los gabinetes de comunicación de partidos y empresas.

Conferencia inaugural del Simposio. De izquierda a derecha: Joan Cal, director ejecutivo del periódico Segre, presentador; Milagros Pérez Oliva, periodista de El País, autora de la conferencia inaugural. Fuente: Comité organitzador del Simposio.

Las intervenciones en las sesiones plenarias dedicadas al sistema público coincidieron también en señalar algunos de los impedimentos o límites a la libertad de prensa y el derecho de la información que afectan a los medios públicos. La cultura política y la regulación de los mecanismos de gobernanza fueron señaladas como factores cruciales en la garantía de independencia de los medios públicos. La comparativa internacional de la primera sesión plenaria sirvió para identificar algunas buenas prácticas en el funcionamiento de los medios públicos —cultura democrática y profesional, mecanismos de financiación estables y suficientes, limitación a la intervención de los partidos políticos en el nombramiento de cargos, entre otros. Por el contrario, la situación en los países del sur y el este de Europa ejemplifica algunas de las principales amenazas a la libertad de prensa en los medios públicos —intervencionismo gubernamental, insuficiencia financiera, presupuestos ligados a decisiones políticas a corto plazo, crisis del sector público, entre las principales.

Ponentes de la sesión dedicada a "Libertad de prensa y medios públicos en Europa". De izquierda a derecha: Roser Perera, subdelegada de la Corporació Catalana de Mitjans Audiovisuals (CCMA) en Lleida y Pirineu (moderadora); Luis Antonio Santos, periodista y profesor de la Universidade do Minho, de Braga (Portugal); Babis Kokosis, periodista de Ellinikí Radiofonía Tileórasi (ERT), la televisión pública griega; Carles Llorens, profesor del Departament de Comunicació Audiovisual i Publicitat (Universitat Autònoma de Barcelona); y Laura Bergés, profesora del Departament de Filologia Catalana i Comunicació (Universitat de Lledia) y miembro del Euromedia Research Group. Fuente: Comité organizador del Simposio.

La mesa redonda dedicada al Servicio Público en España sirvió para denunciar malas prácticas en los medios públicos autonómicos y estatal, sometidos a múltiples presiones del poder político, y para reclamar una regulación que ofrezca garantías a la independencia periodística y a la noción de servicio público. En el caso catalán, se explicó el proceso de colaboración entre el Col·legi de Periodistes i las Universidades para elaborar una nueva propuesta de regulación.

Los talleres donde estudiantes de distintas universidades catalanas y valencianas presentaron sus trabajos de investigación incidieron también en la denuncia del empeoramiento del estado de la libertad de prensa tanto a nivel estatal como autonómico y local. En esta línea, se pusieron sobre la mesa algunas de las trabas a la libertad de prensa que afectan a los medios privados y públicos que ya habían sido introducidas en la conferencia inaugural y que se pudieron profundizar en los talleres. Los talleres contaron con la participación de estudiantes y profesores de cinco universidades y representantes de diferentes organizaciones profesionales y sindicales del periodismo, que presentaron y debatieron trabajos de investigación sobre las políticas de ayudas públicas y concesión de licenciasmedios localesrendición de cuentas de los periodistas frente a la sociedad, y el tratamiento periodístico que reciben algunos temas de especial sensibilidad social.

Desde distintas perspectivas, el debate en los talleres coincidió en destacar algunos de los límites a la libertad de prensa y el derecho a la información en el contexto actual: los criterios partidistas y la falta de transparencia en las decisiones sobre las ayudas a la prensa y en la adjudicación de licencias de radio y televisión; las presiones de los gabinetes de comunicación institucionales y de los partidos sobre la tarea de los periodistas, especialmente en los medios locales; la precariedad laboral en las empresas periodísticas; las presiones comerciales y la mercantilización de la información, fueron algunos de los aspectos más destacados.

En el ámbito propositivo y como conclusiones del Simposio sobre libertad de prensa se reclamó:

• Una reforma legal en la regulación de la gobernanza de los medios públicos, introduciendo mecanismos de participación ciudadana, el criterio profesional y los límites a la discrecionalidad de los partidos políticos en el nombramiento de cargos y en las asignaciones presupuestarias.
• Mejoras en la transparencia de los procesos de adjudicación de licencias de emisión y en las políticas de subvenciones o ayudas a los medios privados.
• Un mayor celo profesional en la salvaguarda de la independencia profesional y la aplicación de los principios de la profesión periodística, frente a las presiones económicas y políticas que afectan a la profesión.
• Estrategias para conseguir la implicación ciudadana en la defensa y los debates relacionados con el derecho a la información.
• Una mayor interrelación también entre periodistas y sociedad civil para un periodismo más atento a la agenda social.

Presentación de las conclusiones de los talleres del Simposio. De izquierda a derecha: Jasmin Juan (UdL, sobre el taller “La libertad de prensa y los temas de especial sensibilidad social: análisis de las coberturas periodísticas”; Aida Martori (UAB, coordinadora del taller “Ayudas públicas (y otras políticas públicas de comunicación) y libertad de prensa”; Laura Cugat (UPF, sobre el taller “Libertad con responsabilidad: mecanismos de los periodistas para rendir cuentas de su trabajo”, y Laura Bergés (UdL y miembro del Comité organizador, sobre las conclusiones del taller “La libertad de prensa en el ámbito de la comunicación local: la prensa local y los gabinetes de comunicación institucional”, en nombre del coordinador del taller, Francesc Martínez (UV). Fuente: Comité organizador del Simposio.

1. Taller “Libertad con responsabilidad: mecanismos de los periodistas para rendir cuentas de su trabajo”

Coordinado por Xavier Ramon, de la Universitat Pompeu Fabra (UPF)

En el taller “Libertad con responsabilidad: mecanismos de los periodistas para rendir cuentas de su trabajo”, conducido por Xavier Ramon (UPF), se destacó la importancia de los diferentes mecanismos de accountability para supervisar, criticar y analizar la calidad de la información periodística.

La primera intervención, a cargo de Xavier Ramon, puso de manifiesto que en los últimos años, el uso creciente de instrumentos de rendición de cuenta innovadores (como los blogs editoriales, observatorios, chats, redes sociales o botones de corrección de errores) ha generado nuevos espacios de supervisión, reflexión y debate sobre la línea editorial y la calidad de los contenidos, en los que la participación activa del público juega un papel fundamental. En el escenario digital, los usuarios son corresponsables del compromiso de llevar a cabo un periodismo riguroso y de calidad. En esta primera intervención se pudo observar que Eldiario.es es uno de los medios más activos en la rendición de cuentas en la era digital, ya que dispone, entre otros, de un blog del defensor del lector, de un blog editorial y transparencia en las cuentas y los resultados financieros, además de recomendaciones específicas para orientar a la participación de los usuarios a la hora de realizar comentarios.

La segunda presentación, a cargo de Elsa Cano y Laura Cugat, estudiantes de Periodismo de la UPF, permitió ver cómo los jóvenes periodistas también pueden rendir cuentas de su propio trabajo. En concreto, explicaron como a través de distintos blogs editoriales, los alumnos examinan críticamente su propia tarea como redactores del medio multiplataforma Cetrencada, que tiene difusión real a través de El Punt Avui, BTV, VilaWeb y Barcelona FM. A través de este ejercicio de transparencia, explicando el proceso de producción de los contenidos, los principios deontológicos que se han tenido en cuenta, las dudas éticas que se han tenido que resolver y los errores cometidos.

La tercera ponencia, realizada por Anna Pifarré, Sandra Roman, Marta Vidal y Josep Regany, de la Universitat de Lleida (UdL), pusieron de relieve el hecho de que en muchas ocasiones, los comentarios de los lectores en la red no aportan debate constructivo. La intervención y posterior debate puso de manifiesto que los periodistas tendrían que participar activamente en las conversaciones para moderar la calidad de los mensajes y evitar contenidos de rechazo o que generen odio y discriminación. También se planteó la clara necesidad de que los medios apuesten por implantar recomendaciones que ayuden a las audiencias a generar mejores comentarios.

Finalmente, la participación de Maria Cabello, Ester Cunillera, Lucía Ramón y María Vilas (UdL) ilustró la contraposición entre inmediatez y rigor en el escenario digital. Muchas veces, en internet prima la inmediatez, la cultura del clic y no hay suficiente contraste de fuentes, hecho que conduce a una pérdida de credibilidad y respetabilidad de los medios. Ante este escenario, las ponentes resaltaron que las redes sociales son un instrumento de rendición de cuentas de primer orden para monitorizar los contenidos y poner en evidencia las malas praxis periodísticas.

1. Taller “La libertad de prensa en el ámbito de la comunicación local: la prensa local y los gabinetes de comunicación institucional”

Coordinado por Francesc Martínez, de la Universitat de València (UV)

En el taller sobre libertad de prensa en el ámbito local se presentaron tres comunicaciones que analizaban la situación en el País Valencià y en Lleida.

Francesc Martínez, de la Universitat de València, ofreció una panorámica de los diferentes mecanismos que han ido laminando la libertad de prensa, especialmente a nivel local, pero también en los medios de alcance autonómico, en el País Valencià. El profesor de la Universitat de València destacó como el poder político, y especialmente los sectores cercanos o vinculados al Partido Popular, había intervenido alterando las líneas editoriales de los medios privados, a través de medidas como la creación y sostén financiero de los medios locales y gratuitos de propiedad y/o dirección controlada por personas cercanas al partido, la concesión de créditos por parte de cajas como la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM), las ayudas públicas y la publicidad institucional, o la concesión de licencias de TDT local y autonómica. Acciones que en algunos casos aparecen vinculadas con las trampas de corrupción investigadas que afectan al PP. El control férreo de la televisión pública, un discurso que identificaba Valencia con el PP, la coordinación de mensajes o consignas a través de los gabinetes de prensa, y la poca transparencia en la acción pública, han sido otros mecanismos de limitación del derecho a la información y la libertad de prensa que, sumados a los anteriores, han afectado especialmente a los medios catalanes y en catalán y, en general, a los de línea editorial contraria a los postulados del poder político.

Las estudiantes de la UV Paula Navarro y Laura Pérez presentaron un trabajo de curso en el que, a través de cuestionarios a periodistas de medios locales y de gabinetes de comunicación municipales, constataban la existencia de presiones sobre las redacciones por parte de los gabinetes institucionales y también por parte de los anunciantes (privados e institucionales). La crisis económica, con la pérdida de puestos de trabajo y la precarización de las condiciones laborales, habría incrementado la dependencia económica respecto a la publicidad, y la dependencia respecto a las notas de prensa que abaratan la producción periodística. En un vídeo de las mismas estudiantes sobre el tema, los entrevistados manifestaban estas presiones, pero también las estrategias de los medios para intentar sortear presiones y la profesionalidad de algunos de los responsables de los gabinetes institucionales conscientes de que su tarea no se tendría que definir por hacer propaganda de los equipos de gobierno sino por garantizar el derecho de la información de la ciudadanía respecto a los asuntos municipales.

La presentación del grupo Barnils de Ponent, a cargo de Àlvar Llobet, y basada también en un cuestionario a periodistas de medios y de gabinetes de comunicación de la demarcación de Lleida, coincidió con la anterior intervención en destacar las presiones que se ejercen sobre todo desde el poder político —partidos políticos, representantes políticos y gabinetes de comunicación institucionales—. De los resultados de la encuesta, Àlvar Llobet destacó también que, por una parte, la mayoría de periodistas había acatada en parte o completamente las presiones para modificar o incluso censurar sus textos. Mientras que, en contraste, también una mayoría de periodistas señalaba que no había represalias si no se plegaban a las presiones.

Las principales conclusiones extraídas de las presentaciones y el debate posterior son:

• el poder político interviene de forma mucho más significativa sobre los medios de comunicación locales y autonómicos, tanto en aspectos estructurales (creación de medios, concesiones de licencias), como en la viabilidad económica (ayudas públicas, créditos y publicidad institucional), y en la tarea periodística (presiones sobre las redacciones, coordinación de un discurso que modifica la agenda informativa).
• Los medios de comunicación locales encuentran muchas dificultades para hacer frente a las presiones y mantener su independencia, situación que se ha agravado con la crisis económica.
• Se detecta cierta falta de consciencia por parte de los propios periodistas de los condicionantes que comprometen su independencia. Los resultados de las encuestas apuntarían también a que en muchos casos se acaba aceptando cierta autocensura aunque al mismo tiempo se reconoce margen para resistirse sin sufrir consecuencias.
• Los procesos de injerencia desde el poder político son procesos lentos, que van limitando el derecho a la información de forma paulatina de manera que se van naturalizando. La falta de hábitos de lectura y de búsqueda y consumo activo de información por parte de la ciudadanía explica también el grado de tolerancia al deterioro de su derecho a la información.

1. Taller “Ayudas públicas (y otras políticas públicas de comunicación) y libertad de prensa”

Coordinado por Aida Martori, de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB)

En el taller “Ayudas públicas (y otras políticas de comunicación) y libertad de prensa” se presentaron trabajos y reflexiones de temática bastante heterogénea. El denominador común eran las políticas de comunicación, y se destacó que estas afectan al pluralismo de los medios. También se puso de manifiesto la falta de transparencia, tanto a la hora de legislar en materia de comunicación como con respecto a la información transmitida a la sociedad y a los investigadores.

En la primera presentación, Angy Galvín, estudiante de periodismo de la UAB, presentó su Trabajo Final de Grado, que ya estaba bastante avanzado, en el que se pregunta si el Consejo del Audiovisual de Cataluña (CAC) vigila de manera eficiente el pluralismo político en Televisió de Catalunya. La investigación se basa en la consulta de los informes y acuerdos del CAC, así como entrevistes. Galvín concluye que el CAC es un organismo necesario de control de la normativa audiovisual, aunque critica que está bastante politizado, y reclama su profesionalización, de forma que los consejeros se escojan por méritos profesionales. También propone que se introduzcan análisis sobre las tertulias, y análisis cualitativos que complementen los cuantitativos que se están haciendo.

Seguidamente, Carla Genís, también estudiante de periodismo de la UAB, presentó la ejecución de su Trabajo Final de Grado. La investigación hace patente que las políticas de comunicación —y, en concreto, la adjudicación de licencias— son relevantes para el pluralismo (externo) del sistema comunicativo catalán. Genís analiza la adjudicación de un MUX de televisión autonómica al grupo Godó y concluye que fue un proceso opaco, del que le está costando mucho obtener información que tendría que ser pública o accesible para los investigadores. Referente a este aspecto, consideró relevante consultar el documento que resolvía el concurso de adjudicación de estos canales, pero está chocando con numerosas trabas para acceder a él.

El tercer turno fue para los estudiantes de la Universitat de Lleida (UdL) Àngel Jané, Clàudia Darder, Gemma Fontané y Sandra Dueñas, que expusieron el planteamiento de su trabajo de curso, en el que querían ver la relación entre ayudas públicas e (in)dependencia de los medios de comunicación. Para hacerlo, escogieron los periódicos La Vanguardia, El Periódico y Ara, de los que analizaron las portadas y los editoriales del día después de las últimas elecciones catalanes. En la elaboración de este trabajo se encontraron dos problemas. El primero, en la línea ya apuntada, las dificultades para acceder a la información sobre las ayudas públicas a los medios de comunicación. Hay que tener en cuenta, que más allá de las ayudas estructurales a la prensa, hay subvenciones a proyectos y publicidad institucional, poco transparente (no se explicita qué importe va a parar a cada medio). En el debate referente a esta cuestión, se destacaron los «tentáculos» de las ayudas públicas, que van más allá de las ayudas regladas. Por otro lado, era difícil ver la correlación entre ayudas y línea editorial. Por este motivo, se apuntó la posibilidad de reorientar el trabajo hacia la ética y el respeto a los códigos deontológicos, a partir de las portadas y editoriales ya analizados en estos medios.

La última comunicación fue a cargo de Francesc Ràfols del Sindicat de Periodistes de Catalunya, que defendió el derecho a la información como derecho humano. Explicó que desde el 3 de mayo de 2015 ha habido retrocesos en el campo de la libertad de prensa. Destacó la falta de voluntad política para hacer avances en este campo. Se puso de manifiesto que la información no puede ser tratada como una mercancía, y denunció la situación de bloqueo que sufren los medios del tercer sector. También destacó que un periodista precario ni puede ser independiente ni libre y que, por tanto, la precariedad laboral de los profesionales tiene efectos en la libertad de expresión.

Como conclusiones del taller, teniendo en cuenta los trabajos presentados y el debate posterior, se pueden señalar:

• Las políticas de comunicación, entre las que se encuentran las ayudas públicas a los medios de comunicación, la adjudicación de licencias o el nombramiento de cargos del CAC, tienen efectos sobre el pluralismo y la libertad de prensa.
• Destaca la falta de transparencia a la hora de hacer pública la información, y se reclamó más facilidad de acceso a documentación oficial, como las resoluciones de los concursos por los que se adjudican licencias.
• Hay que seguir defendiendo el periodismo plural y de calidad, unas políticas de comunicación más justas y transparentes y unas ayudas libres de injerencias políticas. Todo eso, para mejorar en el campo de la libertad de prensa y que no se siga deteriorando, como apuntan los últimos informes sobre la materia a cargo de Reporteros sin Fronteras, Freedom House o la Fundación Reuters.

El taller sirvió para reclamar unas políticas de comunicación beneficiosas para la ciudadanía —y no para los grandes grupos de comunicación— y, en definitiva, para la libertad de expresión y el derecho a la información.

1. Taller “La libertad de prensa y los temas de especial sensibilidad social: análisis de las coberturas periodísticas”

Coordinado por Anna Clua, de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC)

En el taller sobre el tratamiento de los temas de especial sensibilidad social se presentaron distintos trabajos que respondían a dos enfoques diferenciados. Por un lado, Dardo Gómez, de la Federación de Sindicatos de Periodistas, y David Espert y Romà Vila, de la UOC, expusieron reflexiones de carácter más general o teórico sobre la responsabilidad social del periodismo y el papel que juega en la democracia, contrastando el papel de los medios de comunicación más convencionales, con las formas de participación de la ciudadanía en la construcción del discurso público, no sólo como a espectadora sino también como creadora de contenidos. Por otra parte, los trabajos de los estudiantes de la UdL estaban enfocados al análisis de cómo los medios responden a su responsabilidad social en la cobertura de la información sobre casos que generan especial sensibilidad social, como el tema de los refugiados, la violencia doméstica o el maltrato animal. Este doble enfoque permitió un debate en torno al papel de los medios desde un punto de vista normativo y su desarrollo práctico en el tratamiento de determinadas informaciones.

Dardo Gómez puso énfasis en la importancia del derecho a la comunicación como un derecho de la ciudadanía, que no se ha de confundir con la libertad de empresa periodística. Por este motivo, reivindicó el derecho ciudadano a crear medios de comunicación, que permitan desarrollar un periodismo más independiente del poder del estado y de los grupos empresariales. Los trabajos de David Espert y Romà Vila coincidieron también en destacar el papel positivo de las redes sociales a la hora de abrir a una mayor participación ciudadana la producción y circulación de la información, en tanto que permiten viralizar informaciones de muy distintas fuentes, aunque también reclamaron las oportunidades de control social que van aparejadas a estas redes y tecnologías digitales.

Por su parte, los trabajos de análisis de contenido presentados por los estudiantes de la UdL partían de cuestionar las posibles limitaciones en la tarea del periodismo profesional en la cobertura de temas que generan especial sensibilidad social. En este caso, pues, se valoraba cómo responden los medios a aquellas temáticas donde hay una especial demanda informativa por parte de la ciudadanía. Judit Castells, Marc Guillén y Sergi Massip precisamente compararon el tratamiento que se da al tema de los refugiados en los medios periodísticos profesionales con la cobertura que dan los medios propios de la ciudadanía movilizada en torno a este tema, en este caso, las ONG. Su análisis destacaba una mayor atención a historias personales en el caso de las ONG, mientras que los medios ofrecían una información más distanciada y con más datos de contexto.

Yasmín Juan, Abundi Bordera y Andrés Restrepo se fijaron en el tratamiento de un tema, el maltrato animal, que también ha generado un debate social importante en los últimos años, con una movilización ciudadana importante. Su análisis se fijó en como, fruto de esta mayor movilización y debate ciudadano, este tema ha ido ganando presencia en los medios de comunicación, aunque identificaban carencias importantes en cuanto a la continuidad de las informaciones y en cuanto al tratamiento, más centrado en las personas famosas involucradas en casos de maltrato que en propio hecho en sí o en el trato jurídico de los casos.

Finalmente, Marta Dalmau, Lorena Giménez, Henriette Jonker y Laura Solans expusieron una propuesta de análisis sobre el tratamiento de la violencia doméstica que afecta a los hombres, interrogándose sobre cómo se tendría que abordar un tema que queda eclipsado ante el problema que representa la violencia machista contra las mujeres.

Como conclusiones generales del taller, se destacó el momento de confusión que vive el mundo del periodismo, en un contexto también cada vez más complejo. Se pusieron sobre la mesa dos aproximaciones a la reivindicación del derecho a la información: la creación de medios de comunicación ciudadanos, independientes; y la demanda de mejor información por parte del periodismo profesional de los medios de comunicación convencionales. Las distintas presentaciones coincidieron en señalar como amenaza al derecho a la información la creciente importancia de los criterios de impacto mediático frente a los criterios de interés público y rigor de la información, y la importancia de las nuevas tecnologías para conocer cuáles son los temas que interesan a la ciudadanía. En el debate se trataron las dificultades para mantenerse fieles a los propios ideales y a los códigos deontológicos de la profesión, reivindicando los mayores márgenes de libertad que se pueden encontrar en los medios independientes, pero señalando también algunas de las carencias del periodismo ciudadano.

[1] Para acceder a los vídeos de las distintas sesiones del simposio, véase el canal Youtube del Col·legi de Periodistes de Catalunya.